Los
sueños son una fuerza poderosa, que nos mueven a través de los años y las
distancias, a través de tierra y marea. Nos hacen viajar, hasta poder sentir
que llegamos a nuestro destino.
La
obra de Laura Langman nos permite conocer los devenires de los mismos sueños,
tanto conscientes como inconscientes; nos llevan a través de distintas épocas
en un viaje casi onírico para mostrarnos sus pasiones y pensamientos.
A
través de su historia, de su familia, la artista señala los recuerdos que más
la marcaron, las sensaciones que forjaron su carácter, todo esto visible a
través de sus obras.
Las
valijas hacen referencia a la llegada de sus antepasados a nuestro país, los
relojes apuntan el paso de ése tiempo. Las sombrillas hablan de su niñez frente
a la inmensidad del océano; los naipes, el azar que siempre hace variar el
camino planeado.
El
recorrido que aquí se nos presenta tiene la particularidad de ser algo
completamente único, una experiencia que promete una nueva manera de apreciar
las lecciones que se nos presenten en el futuro.
El
trabajo de Laura Langman nos otorga una nueva lente a través de la cual podemos
observar nuestra realidad.
Florencia Molodezky
